Confesiones.

Hoy, voy a confesar, algo que debí haber confesado hace mucho tiempo ya.

Tras mi máscara de plena felicidad, de no tener problemas, como he dicho, tras mi máscara está mi verdadera cara.
No va de meses ni de días, ni de meses, sino de años.
He aquí mi problema;
¿Alguna vez habeis sido rechazados en el amor? ¿Alguna vez os han ignorado sin nisiquiera daros una oportunidad? ¿Alguna vez os han rechazado... porque la persona que le robaba el sueño... no érais vosotros?
Pues bien, que que está de sobra decir que a mí sí me ha pasado. Y eso duele, duele mucho. Cuando te pasa algo como esto, lo primero que piensas es "Pasemos página." Pero nos damos cuenta de que no es tan fácil como pensábamos, nuestro autoestima cae en picado, y en lo sieguiente que piensas es en el típico "¿ Y que tiene esa otra persona que no tenga yo?". Y ahí, justo ahí, es cuando nos perdemos en nosotros mismos, nos desesperamos, pero claro, eso no impide que sigamos detrás de esa persona que sin querer (o tal vez queriendo) nos ha hecho tanto dño con su rechazo. Así que, comienza la fase en la que nos engañamos a nosotros mismos, y nos hacemos  ilusiones con un futuro totalmente incierto, nos da por imaginar que aún no estamos perdidos del todo, asique nos volvemos a negar aún más a dejar atrás a esa persona. Y cuando estamos en esta última fase... comienza lo peor, nos encerramos en una espera interminable que seguramente no nos lleve a ningún sitio.
En mi caso, no sé qué es exactamente lo que espero.
He estado mucho tiempo creyendo que si él se había fijado en ella, y no en mí, era porque yo no estaba a su nivel. También pensando que ella era superior a mí, pero si lo pienso, es una verdadera locura, ¿Ser superior por tenerle a él?, tal vez no tenga mucho sentido, la verdad..
Pero no lo voy  negar, he querido más de una vez ser ella, llegar a "su nivel", caerle tan bien a la gente como lo hace ella, tener lo mismo que tiene ella, pero he sentido que ella era el tipo de persona con la que siempre he soñado ser pero nunca podré ser...
Pero ... ¿eso tiene acaso algún sentido? Yo soy yo, y ella es ella. Y realmente, martilizarme día y noche por no ser ella, me mata.
Hace tiempo que me dejo la piel en ser perfecta, y no, no he conseguido serlo, pero creedme que lo he intentado.
Estas líneas hoy son una liberación para mí, era algo que nunca había contado por vergüenza propia, supongo.
Asique ahora, voy a ser yo, sin necesidad de tener que parecerme a nadie, porque yo soy suficientemente importante como para ser yo misma.
Lo que pretendo decir con esto, esque nada ni nadie debería ser tan importante como para querer ser otra persona, porque si finjís, y vivís siempre "a la sombra" de otra persona, os estareis perdiendo a vosotros mismos, y si os peredeis a vosotros mismos... lo habreis perdido todo.
Además, hay millones de persona en el mundo que sabrá valorarnos con nuestros defectos y nuestras virtudes, esto que digo, no es nada fácil , pero será imposible si no se intenta.